Pese a las críticas que reciben las stablecoins (monedas estables) y los emisores de las mismas, existe una gran oportunidad para el crecimiento integrado. Se trata de un tema que suele tener apoyo bipartidario; el hecho de que el sector bancario de Estados Unidos es cada vez menos competitivo. Algunos hasta dirían que es un mercado oligopólico. Este arreglo genera inconvenientes en la competencia bancaria y las stablecoins podrían revertirlos. Los más habituales son:
- Tarifas y recargos que generan miles de millones de dólares.
- Pocas opciones bancarias para millones de estadounidenses.
- Falta de competencia que a futuro pondrá en desventaja a los Estados Unidos.
Las stablecoins están evolucionando y ampliando sus funciones dentro del ecosistema de activos cripto, y esto puede aplicar para mejorar la competencia bancaria. De todas maneras, es importante diferenciar el tipo exacto de stablecoin que se está discutiendo en este contexto. En el papel, las stablecoins pueden tener soporte o estabilidad con cualquier cosa. El enfoque de los pagos con stablecoins y el debate está centrado en las monedas estables respaldadas uno a uno con el dólar estadounidense. Uno puede pensar que crear un criptoactivo respaldado por el dólar y que su comportamiento sea similar, es redundante, pero es dejar de lado los aspectos más amplios.
Implicaciones positivas de las stablecoins en la competencia bancaria
Competitividad en el sector bancario. Hay riesgos y otros factores a resolver antes de conseguir la integración masiva de stablecoins emitidas por privados o con el respaldo del banco central. Difícilmente un analista o institución del sector podría sostener que hoy el sistema bancario de Estados Unidos es un semillero de competitividad. Los cinco bancos más grandes de Estados Unidos controlan el 40% del mercado, y la tendencia hacia los bancos promedio es de ahogo de activos, personal y otros recursos.
Introducir competencia con stablecoins, aún a través de instituciones autorizadas y aseguradas por el gobierno federal, permitiría una dosis sana de competencia bancaria en el sector. Las organizaciones dinámicas y creativas atraen a la gente y el capital. Por el contrario, las regulaciones ahuyentan a nuevos capitales. El libre mercado es la clave para aumentar la competencia en el sector.
Mayor accesibilidad. Habitualmente se mencionan los daños que pueden ocasionar las tarifas bancarias, los recargos y el acceso desigual a servicios bancarios. ¿Cómo se pueden reducir esta desigualdad si se excluye a numerosos estadounidenses del sistema bancario y los servicios derivados?
La banca en línea forma parte de la nueva tendencia a la digitalización, y aborda tanto la vida económica como personal. La aparición de los desiertos bancarios, tramos censales donde no hay sucursales bancarios en 10 millas a la redonda, explica la expansión de las alternativas online. De acuerdo a estudios realizados por la Reserva Federal de Nueva York, estos desiertos afectan a las comunidades rurales, poblaciones de ancianos y comunidades alejadas. El acceso desigual a Internet terminaría por generar imposibilidad para acceder a servicios financieros modernos. Allí, las criptotransacciones destacan por aumentar la accesibilidad, transparencia y permitir menos gastos al democratizar el sistema financiero. Las transacciones con stablecoins son más claras y podrían mejorar la competencia bancaria.
El futuro son los criptodólares
En febrero de 2022, durante las audiencias por las monedas estables, el tema más recurrente fue el incremento de las criptotransacciones. Las CBDCs están entrando al mercado a alta velocidad, impulsadas por la integración continua del E-CNY en la economía china. La carrera por desarrollar la moneda y las formas de pago del futuro, está aquí. El Banco de la Reserva Federal de Boston y el MIT están avanzando con esfuerzo en esa dirección, pero son los primeros pasos de un proceso que será largo.
La prioridad política es fundamental para que las stablecoins puedan mejorar realmente la competitividad bancaria. Estados Unidos posee una ventaja objetiva, el dólar es el activo de reserva global. Ese rol es un privilegio, no un derecho. Cada vez más monedas digitales y de tecnología blockchain se posicionan como la referencia para la economía del futuro. El sector bancario y los sistemas de pago también están atravesando estos cambios. Aquellos que evolucionen y apliquen nuevas maneras de conducir las transacciones seguramente superen a los que no.
Las stablecoins son una forma de cripto activos que tienen críticos en todos los sectores. Desde Bitcoin y los partidarios de la economía descentralizada, sostienen que van en contra de los orígenes del mundo cripto. Los partidarios de un cripto dólar emitido por Estados Unidos no confían en la emisión privada. Si dejamos ambas críticas de lado, no podemos ignorar que las stablecoins juegan un papel protagónico en los sectores de bancos y pagos que están evolucionando. La pregunta es si los responsables de la política se darán cuenta a tiempo.
